Fedrigoni Self Adhesives ha presentado su nueva línea de productos Re-Play, cuyo objetivo es reciclar el soporte de papel glassine desechado de otros productos autoadhesivos en una nueva solución de etiquetado de alta calidad.

Según Fedrigoni, el soporte siliconado de las soluciones autoadhesivas anteriores suele desecharse y sólo se recicla parcialmente. En colaboración con Les Papeteries de Clairefontaine, el papel glassine recuperado se combina ahora con papel blanco de desecho para formar un nuevo material autoadhesivo, que se dice que está compuesto al 100% de material reciclado, se corresponde con la certificación FSC y evita la necesidad de un proceso invasivo de destintado.

Se cree que cada producto contiene entre un 10% y un 20% de papel glassine reciclado. Los clientes también pueden elegir entre papeles de diversas formas y texturas, incluyendo un diseño Blanco Natural sin estucar; una Etiqueta de Cuello de textura similar para cuellos de botella y diámetros reducidos; y texturas que van desde el nacarado hasta los papeles gofrados Martelé y Retrò.

Dentro de este desarrollo, Fedrigoni pretende aumentar el valor del producto en toda su cadena de valor reduciendo la cantidad de residuos producidos y asegurándose de que el resto se recicla. También espera que la gama Re-Play contribuya a sus objetivos de sostenibilidad para 2030, que incluyen una reducción del 30% en las emisiones de CO2 de alcance 1 y 2; una recuperación del 100% de sus residuos industriales; y un crecimiento del 35% al 70% en las características ESG de su cartera de productos autoadhesivos en comparación con su año base 2019.

“El proyecto es un excelente ejemplo de implicación de toda la cadena de suministro en el proceso de economía circular, empezando por los impresores: de hecho, Fedrigoni Autoadhesivos recoge y recupera el liner en las instalaciones del cliente, contribuyendo a la reducción de los residuos producidos y del consumo energético”, afirma Fernando Girón, director comercial de rollos de Fedrigoni Autoadhesivos. “Elegimos este camino porque se alinea con varios de nuestros objetivos ESG en términos de reducción de residuos y emisiones de CO2”.

En otro proyecto de reducción de residuos, los residuos de PET liner de UPM Raflatac fueron procesados por Inosence Polyol y utilizados por Finnfoam para producir aislantes.

UPM Raflatac también incorporó residuos plásticos oceánicos certificados a sus etiquetas Ocean Action en colaboración con HHI, SABIC y Taghleef Industries; y Ahlstrom-Munksjö amplió su línea de papeles antiadherentes basados en fibras renovables para revestimientos de silicona adhesiva sensibles a la presión.

Fuente: www.packagingeurope.com